Reseña: Tus noches y mis días — May Boeken

TUS NOCHES Y MIS DÍAS

MAY BOEKEN

Grijalbo
Páginas: 592

Mediterráneo #2

Cubierta: 

¡Hola, hola, hola!

Otro romance por aquí, esta vez tirando de cantera nacional, y una autora a la que no había leído aún pero sobre la que había oído maravillas. 

Ahora, vuelvo a toparme con mi antiguo enemigo una vez más: una segunda parte de la que no había leído la primera (Lucía, deberías informarte mejorrrrrr) pero, afortunadamente, como en la mayoría de sagas románticas, los protagonistas son distintos y se puede leer de forma independiente, aunque ahora tenga de deberes leer el primero... jeje

Unai y Lorena se conocieron en el camping Voramar, a orillas del Mediterráneo, y desde adolescentes compartieron veranos, aventuras y atracción, un amor que no fue y una amistad eterna. Años después, vuelven a coincidir en el mismo lugar, pero con circunstancias diferentes: él, luchando por reflotar su relación con su mujer, mientras ambos cuidan de sus dos hijas; ella, llevando las riendas del camping, habiendo renunciado a demasiadas cosas. Cuando vuelvan a verse, reflotarán los recuerdos y secretos que llevan tanto tiempo guardando. 

Ostris, no vi yo venir tantísimo drama en esta historia (que no me quejo, eh), pero pensé que sería más un romance suave, segundas oportunidades... y me he encontrado con una historia de desamor que, por supuesto, termina bien, pero que me ha hecho sufrir lo indecible. 

Me he encontrado con una historia conmovedora, alternando capítulos del pasado y del presente de los personajes: el inicio de la amistad, las juergas, dramas y sentimientos que compartieron Unai y Lorena de jóvenes, y su presente, donde ninguno de los dos es feliz. Pero lo mejorcito ha sido lo maravillosamente hechos que están todos los personajes: protagonistas o secundarios, incluso los que eran inaguantables tenían personalidad propia y saltaban de las páginas. 

La novela ha sido una montaña rusa continua, adictiva, emocionante, con mucho drama (me repito, pero ¡es importante!), pero también escenas subidas de tono, temas de peso y conversaciones tiernas. Ahora me muero por leer la precedente.