Reseña: Scherzo — Estefanía Jiménez

SCHERZO

Estefanía Jiménez

Editorial: Ediciones Kiwi

Páginas: 556

Autoconclusivo

No sabéis lo nerviosa que me pone no poder/saber pronunciar el título de un libro. Y ya no digamos no saber lo que significa -lo que, por cierto, descubrí al final del libro y resulta que esa palabra existe, obviad mi ignorancia-. Pero bueno, dejando a un lado mis desvaríos, el caso es que me apunté a un sorteo de estos que organiza la editorial y tuve la suerte de conseguir este libro. Había visto la portada pero poco más y... dios, cuando llegó a casa me asusté. Es muy pero que muy gordo. Así que, para qué negarlo, tardé un tiempo en atreverme a leerlo. Que sí, que es una tontería pero... no sé, me agobié un poco.

Estamos en 1789 y Aileen acaba de llegar a Praga, pues en su antigua vida, tras la muerte de su amante, ya no le queda nada -ni dinero, vamos-. Así que en Praga, con la ayuda de su amiga Mirka, empezará su búsqueda de un amante rico que pueda arreglarle la vida, y es que para alguien tan atractivo como ella no debería haber ningún problema. Pero... digamos que cuando se encuentra con Václav, un famoso músico del que corren rumores un tanto siniestros, a Aileen le es imposible resistirse a lo que siente por él, y eso podría hacer peligrar todo lo que ha conseguido hasta ahora. Por otro lado, Václav siente lo mismo por ella, pero esos "rumores" son bastante ciertos, tiene un lado oscuro del que no puede librarse -ni ha querido nunca hacerlo-, pero tal vez gracias a la ayuda de nuestra protagonista consiga cambiar el rumbo de su vida y ser feliz al fin. 

La verdad es que no tenía muy claro qué me iba a encontrar en este libro, aunque todo apuntaba a que sería una historia romántica, y al principio eso es todo lo que parece, y he de añadir que además hay párrafos en plan "romance tórrido", de esos en los que se emocionan con solo mirarse a lo lejos, no sé si me entendéis. Y bueno, a mí ese tipo de historias me hacen más gracia que otra cosa -que sí, que me encantan las historias de amor, pero no de ese tipo-. Sin embargo, según iba avanzando la novela me iba dando cuenta de que había algo que no cuadraba. Y cuantos más problemas aparecían, más me iba enganchando. 

Y es que sí, va sobre la historia de amor entre Aileen y Václav a la que ambos intentan resistirse, pero también va sobre demonios que se meten en el cuerpo de las personas y les obligan a hacer cosas que no quieren. Y sobre muertes, también hay unas cuantas. E intriga, porque no sabes dónde está el demonio y... no quiero mencionar nada más pero ha estado muy interesante la persecución. 

Además de los dos protagonistas, que tienen sus luces y sus sombras, sobre todo Václav pues aunque a veces parece muy bueno ya os he comentado que no es oro todo lo que reluce; también tenemos a Mirka, la amiga de Aileen, que aunque me ha parecido un poco simple, la verdad es que me ha caído muy bien porque intenta ayudarla todo el tiempo; y también están Abir, Avshalom y Dinai, tres judíos que luchan contra los demonios y que persiguen a Václav porque están seguros de que algo en él no está bien -Abir me ha caído bien desde el principio pero los otros dos... me daban muy mala espina-. Y hay otros dos o tres personajes que me han parecido muy importantes pero de los que no os voy a hablar para que os sorprendáis cuando aparezcan ;).

Pues eso, a pesar de ser novela romántica, la verdad es que la historia de amor es lo que menos me ha gustado -al contrario de lo que suele pasar-, no porque fuese mala ni nada, pero simplemente no era de mi estilo, supongo. Pero para compensar, la parte de misterio ha estado genial porque no me la esperaba para nada y tiene unos cuantos giros muy interesantes que te hacen sorprenderte continuamente. 

El final... uf, al principio me he asustado porque pensé que terminaría ahí, de una manera que no me gustaba mucho aunque era perfectamente comprensible, sin embargo al final ha terminado gustándome cómo se ha cerrado la historia.

Así que, resumiendo, sí la recomiendo por todo ese mundo oculto que he encontrado entre sus páginas y, por supuesto, por las descripciones de la ciudad de Praga que he podido encontrar. 

3'5 en realidad