Reseña: La orden del dragón — Jenn Bennett

LA ORDEN DEL DRAGÓN

JENN BENNETT

Puck

Páginas: 373

Autoconclusivo

Traducción: Vanesa Fusco

Portada: Luis Tinoco

Desde que, hace ya ¿años? leí Encuéntrame en Moonlight y me enamoré por completo de esa novela, me moría por leer más historias de Jenny Bennett; es verdad que pensaba que me toparía primero con otro contemporáneo, en lugar de un libro de fantasía, como es La orden del dragón, pero que fuese de otro género diferente también me generaba mucha curiosidad, así que desde luego que no dudé en hincarle el diente. 

Encima, los comentarios que estaba recibiendo lo ponían por las nubes, ¡y me puse manos a la obra tan pronto como saqué tiempo!

El padre de Theodora es un cazatesoros, sin embargo, a ella nunca le permite participar en sus expediciones, a pesar de su impresionante conocimiento de las reliquias más buscadas; en cambio, el que fue su gran amor, el chico que le rompió el corazón, Huck Gallagher, sí cuenta con ese privilegio. Pero, esta vez, algo ha salido mal, y Huck ha regresado de la expedición sin el padre de Theo: juntos, y sirviéndose del cuaderno de viajes de Fox como guía, descubren que va tras un anillo mágico legendario que perteneció a Vlad el Empalador; así, se embarca en una peligrosa aventura a través de los Cárpatos, una carrera peligrosa, pues no son los únicos interesados en la joya: una sociedad secreta, peligrosa y poderosa, también está buscándolo... y no les temblará el pulso para hacerse con él, cueste lo que cueste.

¿Un peligroso viaje a través de Rumania en busca de un poderoso anillo que perteneció a Drácula? Si es que tiene pintaza, no se le puede negar. 

Ahora bien, no sé si ha sido por lo muchísimo que me gustó Encuéntrame en Moonlight, o porque este simplemente no ha logrado conectar tanto conmigo, por ser de fantasía o algo puntual, simplemente, pero el caso es que, si bien lo he disfrutado mucho, también he de decir que esperaba algo más. 

Ha sido una historia muy entretenida, con un viaje asombroso a través de Rumania, cuya ambientación estaba tan bien hecha que casi parecía que estuviéramos dentro de la historia con ellos; con sorpresas, secretos, peligros y giros argumentales, y... sí, si algo podía ir mal, les iba mal (tal vez esta haya sido una de las cosas que me ha costado más creer), pero está claro que el dúo de Theodora y Huck ha dado muchísimo juego, por sus personalidades y sus conversaciones, y no olvidemos el frustrado romance que se traen entre manos, y que me habría gustado que se explotara mucho más. 

En cuanto al tema fantástico, puede que sea porque lo de Drácula no me acaba de convencer en ninguna de las historias que he leído ya al respecto, pero me ha parecido muy emocionante, las persecuciones, la huida, el miedo a lo que pueda ocurrir, y todo lo esotérico y mágico, que ha sido un locurote total. ¿Y el desenlace? Me ha dejado con la boca abierta. 

En definitiva, La orden del dragón ha sido una historia que he disfrutado mucho, muy al estilo de la saga Persiguiendo a Jack el destripador; entretenida y de esas que te hacen viajar y emocionarte.