SALTARÉ LAS OLAS
ELENA CASTILLO CASTRO
Titania
Páginas: 288
Autoconclusivo
Si lleváis por aquí desde el principio o, al menos, desde hace un tiempo, seguramente os hayáis topado ya con unas cuantas reseñas de las novelas de esta autora, como La probabilidad del unicornio o Como caído del cielo, entre otras. Así, como suele pasarme con autoras que ya conozco, en cuanto me enteré de que publicaría nueva novela, me dije que tenía que darle una oportunidad, y más teniendo en cuenta que ¡estaba ambientada en Irlanda! Ay...
Por si esto fuera poco, las críticas que estaba leyendo acerca de la novela estaban siendo muy, muy positivas, por lo que mis ganas no hicieron más que aumentar y aumentar hasta que explotaron.
Imogen necesita empezar desde cero: le acaban de romper el corazón, ha descubierto que realmente no se conoce, y lo mejor que le podría pasar era encontrar trabajo y empezar su nueva vida al otro lado del charco, en Irlanda, en una casita idílica en la cima de un acantilado. Hogar que compartirá con Liam, un joven misterioso, muy popular en el pueblo, que ha estado en el extranjero durante mucho años y que, al volver, no esperaba encontrarse con una desconocida en su casa. Así, Imogen, con la ayuda de sus propios pacientes, de un club de lectura y de su misterioso compañero de piso, descubrirá todo lo que la vida puede ofrecerle.
Ay, he acabado completamente enamorada de Saltaré las olas; que sí, que las novelas anteriores de la autora me habían gustado, por supuesto, si no no habría continuado leyéndolas, pero siempre sentía que les faltaba esa chispa que los hiciera especiales, pero es que este en concreto derrocha sensibilidad y adorabilidad por todas partes.
Me he encontrado con una historia que va directa a los sentimientos, que consigue llegarte al corazón y que hace que quieras implicarte en la trama, con unos personajes reales, con virtudes y defectos, y que presentan una evolución coherente y preciosa, sobre todo Imogen, sí, por supuesto, porque es la protagonista, pero tampoco podemos olvidarnos de Liam, cuya historia también tiene tela...
Y, bueno, encima tiene un desenlace de esos que te deja con el corazón roto pero con una sonrisa, y lleno de esperanza. Perfecto.
En definitiva, Saltaré las olas es una novela dulce, con momentos divertidos pero también sensiblera y conmovedora. Preciosa.
Hola! No conocía el libro pero la verdad es que me gusta la ambientación y parece entretenido así que no lo descarto. Me alegra ver que lo has disfrutado tanto. Gracias por la reseña.
ResponderEliminarUn saludo!
¡Necesito leerlo!
ResponderEliminarCon tu reseña me has acabado convenciendo, se nota mucho que es una historia que te ha encantado, así que me parece que me voy a pasar por la librería cuanto antes! muchas gracias!!