Reseña: Ciudad de las almas perdidas — Cassandra Clare

CIUDAD DE LAS ALMAS PERDIDAS

(Cazadores de sombras #5) Editorial: Destino

CASSANDRA CLARE

Quinta entrega de la saga. No hay mucha historia detrás, pero sí dudas y aplazamiento. Es que no quería leerlo.

Después de la enorme decepción que supuso el cuarto -aunque ya me esperaba que no iba a ser tan bueno como los otros-, simplemente no quería leer este y darme cuenta de que una de mis primeras sagas preferidas se estaba convirtiendo en una chufa.

El caso es que como me había terminado la saga entera de Cazadores de sombras: los orígenes y me había encantado (podéis decir en los comentarios si queréis reseña), decidí darle una oportunidad al quinto. Lo bueno es que tenía las expectativas muy bajas, así que a poco que hiciera algo mínimamente bueno yo ya estaba satisfecha.

En Ciudad de las almas perdidas tenemos a La Clave haciéndose la ocupada, como siempre, dejando la desaparición de Jace en un segundo plano porque claro, hay cosas más importantes (JÁ). Clary, quien está esperando que ésta institución le proporcione respuestas, se da cuenta de que no puede contar con ella para salvar a su novio y mientras se las ingenia para encontrar una pista Sebastian y Jace le proponen irse con ellos. Simon sigue sufriendo por su condición, dudando si decírselo a su hermana debido a la reacción de su madre, lo bueno es que ahora tiene a Isabelle quien cada vez se muestra más interesada en él.

No voy a mentir, leí este libro principalmente por MALEC, Magnus y una duda de la otra saga. Me daba un poco igual lo que les pasara a los protagonistas. La emoción se había esfumado.

Pero Cassandra Clare consiguió revivir esa esencia del principio y el libro fue mejorando haciéndome olvidar lo malo que había sido el cuarto.

En esta ocasión me pareció que Clary perdía todavía más su protagonismo para que todo el grupo fuera importante. En el anterior el que predominaba era Simon, pero en este todos tienen sus conflictos tanto internos como externos y sus capítulos donde todo gira en torno a ellos.

Los personajes se vuelven más humanos, más realistas (dentro de lo que cabe, claro), la autora les dota de una mayor profundidad o al menos eso fue lo que me pareció a mí. Por ejemplo, en este libro Isabelle se abre más como chica adolescente dejando su lado de asesina rompe corazones. También debo decir, que Jace tuvo algún momento en el que se podía ver que quedaba algo del Jace de los tres primeros libros, con su sarcasmo y su sonrisa. Pero no me llegó a convencer. MALEC fue simplemente maravilloso. Por fin se plantean dudas e inseguridades en la gran pareja.

Hablando de parejas, Jace y Clary mejoraron respecto al libro anterior aunque tampoco estuvo la cosa como para tirar cohetes, no sé qué va a hacer en el sexto libro pero esa tensión que ha creado entre ellos debe acabar ya de una vez.

Respecto a Sebastian me ha parecido un buen punto enseñarnos cómo es. Que no lo veamos simplemente como el hijo de Valentine malo malísimo sino que sepamos qué le pasa y cómo actúa cuando no está dando un gran discurso delante de un ejército. Bueno, me cae mal porque me parece un poco psicópata zumbado pero oye, ha estado guay ver su punto de vista.

El problema principal es que hay tantos personajes y todos tienen nombre y un gran apellido (que hay que recordar para futuras sagas o porque quizá sale mencionado en Los orígenes) además de una trama personal que a su vez tiene relación con algo que está ocurriendo ahora... demasiadas cosas para recordar. Llega un momento en el que si no te lees todos los libros de golpe no puedes seguir el hilo, son demasiadas las preguntas sin resolver y la cantidad de personajes a los que se espera que cojamos cariño. No se puede.

En definitiva, Ciudad de las almas perdidas es un buen libro comparado con el anterior donde profundiza en los personajes y nos destroza con ese final. Si lo lees tendrás que tener a mano el sexto.