Reseña: El día que él volvió — Penelope Ward

EL DÍA QUE ÉL VOLVIÓ

PENELOPE WARD

Titania
Páginas: 283

Autoconclusivo

Traducción: Nieves Calvino Gutiérrez

Cubierta: Luis Tinoco

Volvemos a la romántica (lo digo como si en algún momento me hubiese separado de ella, que en realidad no...), en este caso, con una autora que ha tenido muchísimo éxito, y con una novela de la que había oído comentarios maravillosos. 

Segundas oportunidades, el chico rico, una pareja que se reencuentra diez años después de haber vivido el verano de sus vidas... ¿a quién no le gustan este tipo de historias? Desde luego que yo caigo de cabeza con estos clichés. 

Hace diez años, Raven conoció al chico de sus sueños, que resultó ser el hijo de su terrible y snob jefa, por lo que Gavin debía quedar fuera de su alcance. Sin embargo, él era un rebelde, y ambos pensaban que con tener cuidado sería suficiente para vivir su amor sin problemas, pero todo terminó muy mal, con dos corazones rotos. Ahora, aunque se suponía que jamás volverían a verse, Raven ha vuelto a trabajar para su padre, y él ha vuelto por sorpresa, y ambos se darán cuenta de que los sentimientos siguen ahí, no tan enterrados como esperaban, pese a que intentarán luchar contra ellos... 

Pintaba tan, pero tan bien... y no ha terminado de ser lo que esperaba: es verdad que es una historia que engancha rápidamente, muy entretenida y ligera, y por la sinopsis era exactamente lo que iba buscando, pero he sentido que todo avanzaba excesivamente rápido, el amor a primera vista, unos personajes bastante planos, y una relación que no tenía demasiado fundamento. Y los protagonistas son... demasiado perfectos, poco creíbles; mientras que "los malos" son malísimos... muy extremo todo, con pocos personajes grises, que son los que más interesantes me resultan. 

Hay una cantidad ingente de drama, lo que no es algo especialmente negativo, porque me encanta sufrir al estilo de las telenovelas, pero a pesar de ello no ha sido capaz de transmitirme los sentimientos esperados, ni de emocionarme como debería. Lo dicho: me ha faltado desarrollo y profundidad. 

Es un libro de esos que sé que me habría encantado leer con dieciséis, diecisiete años, porque entonces lo habría disfrutado y habría sufrido muchísimo, que es lo que busco con este tipo de novelas, pero en esta ocasión, a pesar de contar con momentos interesantes y entretenidos, me ha dejado bastante fría. 

En definitiva, El día que él volvió es entretenido, se lee en un suspiro, y es una lectura estupenda para coger en verano, pero no ha logrado transmitirme ni emocionarme tanto como esperaba con una historia de este tipo.