MATILDA
ROALD DAHL

Alfaguara
Páginas: 244
Autoconclusivo
Estoy segurísima de que todos conocéis ya la historia de Matilda, aunque seguramente se deba a la adaptación cinematográfica y no a la novela, como me pasaba a mí. Desde pequeña, ha sido una de mis películas favoritas, hasta utilizo frases suyas en el día a día, hasta ahí llega mi obsesión.
¿Una niña a la que le encanta leer y con poderes mágicos? Por favor, pónganme veinte.
El caso es que tenía ganas de leer la historia original, por ver si difería en algo de la película, y cuando sacaron esta edición especial de aniversario, me dije que era el momento.
Desde su más tierna infancia, Matilda destaca por su gran inteligencia y por lo poco que se parece al resto de su familia, los Wormwood, personas desagradables, envidiosas y egoístas; cuando Matilda empiece la escuela, toda su vida cambiará, tanto que desarrollará poderes que no dudará emplear contra aquellos que usan su poder para hacer el mal.
El "problema" de leer un libro después de haber visto su película es que es difícil que te sorprenda porque no suele haber demasiados cambios, al menos no cuando la adaptación es fiel, como en este caso.
Se trata de un libro infantil, por lo que resulta muy sencillo, corto y se lee en un momento, pero eso no quita para que tenga mucha profundidad, para que los problemas y los personajes que presenta nos lleguen al corazón, y es que ¿cómo no emocionarse con las injusticias que sufren los niños en esta novela? Los Wormwood, la Trunchbull... adultos que abusan de su poder y a los que no les importa para nada lo que pueda ocurrirles a los demás siempre que ellos salgan beneficiados.
¿Lo mejor? El papel de los niños, de Matilda, en este caso, que no duda en enfrentarse a esos mayores y "vengarse" por cada mal que han causado, demostrando que los villanos deben recibir su merecido. Y sí, te hace reír en más de una ocasión, dejándote con una sensación muy bonita al terminarlo.
En definitiva, es un clásico que no puede faltar en ninguna estantería: es una historia preciosa, mágica, y llena de valores que enseña lo importantes que son la amistad, el amor y la familia, aunque no esté relacionada por lazos de sangre. Adorable.
¿Una niña a la que le encanta leer y con poderes mágicos? Por favor, pónganme veinte.
El caso es que tenía ganas de leer la historia original, por ver si difería en algo de la película, y cuando sacaron esta edición especial de aniversario, me dije que era el momento.
Desde su más tierna infancia, Matilda destaca por su gran inteligencia y por lo poco que se parece al resto de su familia, los Wormwood, personas desagradables, envidiosas y egoístas; cuando Matilda empiece la escuela, toda su vida cambiará, tanto que desarrollará poderes que no dudará emplear contra aquellos que usan su poder para hacer el mal.
El "problema" de leer un libro después de haber visto su película es que es difícil que te sorprenda porque no suele haber demasiados cambios, al menos no cuando la adaptación es fiel, como en este caso.
Se trata de un libro infantil, por lo que resulta muy sencillo, corto y se lee en un momento, pero eso no quita para que tenga mucha profundidad, para que los problemas y los personajes que presenta nos lleguen al corazón, y es que ¿cómo no emocionarse con las injusticias que sufren los niños en esta novela? Los Wormwood, la Trunchbull... adultos que abusan de su poder y a los que no les importa para nada lo que pueda ocurrirles a los demás siempre que ellos salgan beneficiados.
¿Lo mejor? El papel de los niños, de Matilda, en este caso, que no duda en enfrentarse a esos mayores y "vengarse" por cada mal que han causado, demostrando que los villanos deben recibir su merecido. Y sí, te hace reír en más de una ocasión, dejándote con una sensación muy bonita al terminarlo.
En definitiva, es un clásico que no puede faltar en ninguna estantería: es una historia preciosa, mágica, y llena de valores que enseña lo importantes que son la amistad, el amor y la familia, aunque no esté relacionada por lazos de sangre. Adorable.