Reseña: El priorato del naranjo — Samantha Shannon

EL PRIORATO DEL NARANJO

SAMANTHA SHANNON

Roca Editorial

Páginas: 860

Autoconclusivo

Oh my god. Creo que este es el libro más gordo que leo en mucho tiempo, y no voy a negar que me daba algo de pánico ponerme a leerlo ahora cuando apenas tengo tiempo para hacerlo de seguido; sabía que me iba a llevar unos cuantos días, ¡pero es que le tenía tantísimas ganas!

Llevaba ya bastante tiempo viéndolo por las redes sociales, escuchando opiniones que lo ponían por las nubes, que hablaban de que Samantha Shannon se había convertido en la nueva reina de la fantasía -ejem, todos sabemos que la reina es Sarah J. Maas-, y eso tenía que significar algo. 

Además, la edición es una auténtica preciosidad: la portada es maravillosa, tapa dura, mapas... ¡alucinante!

¿Y de qué va? ¿Dragones? ¿Un priorato... del naranjo? Ahora veréis: 

La leyenda dice que mientras la Casa de Berethnet gobierne Inys, el reino estará protegido de su destrucción, del Innombrable, y así ha sido durante mil años. Ahora, la reina Sabran IX debe concebir una hija para que esto siga así, pero día a día sufre ataques hacia su persona, ataques de los que la libra, en secreto, Ead, perteneciente a una sociedad oculta de magas. Por su parte, al otro lado del mar, Tan se ha preparado durante toda su vida para convertirse en una jinete de dragón, aunque el día antes de la prueba, se ve obligada a tomar una decisión que podría cambiarlo todo. Oeste y Este se mantienen divididos, la religión de cada uno se enfrenta a la del otro, y no son capaces de aceptarse, sin embargo, puede que no puedan vencer a las fuerzas del caos si se mantienen separados. 

Desde luego, es un libro la mar de ambicioso: high fantasy con distintos reinos, historias que se desarrollan de forma paralela, guerras, intrigas palaciegas, secretos, mitología propia, ¡dragones!, piratas, brujas, romance, más secretos y ¿he dicho ya dragones?

Es un señor tocho, y en este caso creo que es recomendable leerlo en dosis, para poder ir asimilando todo lo que explica, toda la información que se nos proporciona de cada reino, de cada personaje, la magia y demás, porque si no puede resultar complicado enterarse de todo, ¡leedlo sin prisa, que si no os vais a marear!

Matriarcado, diversidad, personajes de todos los colores y orientaciones, además de que algunos de los que aparecen en la novela resultan tan complejos que llegan a resultar controvertidos por su forma de actuar, su moral cuestionable, su sentido de la justicia... Pero para mí, las mejores han sido sin duda Ead, Sabran y Tané. Me parece que están increíblemente bien construidas, y ver cómo se iba profundizando en sus personalidades, en sus mentes, ha sido alucinante. Ahora bien, tengo que decir que, en general, aunque no tengo una queja concreta de ellos, sí me ha faltado algo que me hiciese conectar con ellos. 

¿Y la trama? Compleja, con un montón de subtramas, con acción, con guerra, sangre, romance, traiciones, magia... es que tiene de todo, no se le puede poner ninguna pega, la verdad. 

Muchos personajes, muchas historias paralelas, conectadas, donde cada detalle es importante, hay datos que no te explican conectados y que tendrás que deducir por tu cuenta para acabar de comprender cada historia, y es maravilloso, pero ¡ojo! también te obliga a prestar mucha atención. 

Y menudo final, aún sigo en shock. 

Eso sí, parece ser que se trata de un libro autoconclusivo, pero la autora nos ha dejado con un desenlace que presenta más de un hilo suelto, por lo que no me sorprendería que dentro de un tiempo anunciase que va a sacar una secuela o una novela ambientada en el mismo mundo. 

En conclusión, El priorato del naranjo es una novela que no puede faltar en la estantería de todo fan de la fantasía, me ha parecido brutal, compleja, bien hecha y alucinante. 

4.5

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