Reseña: Solo quedó nuestra historia - Adam Silvera

SOLO QUEDÓ NUESTRA HISTORIA

ADAM SILVERA

Puck
Páginas: 320
Autoconclusivo

¡Adam Silvera vuelve al blog! Y esta vez, de nuevo, con una historia LGTB, sí, pero también un tanto distinta. 

Ya sabemos que suele tratar temas que no aparecen demasiado en la literatura juvenil, y encima lo hace de forma directa, sin tapujos y sin andarse por las ramas, lo que no deja de ser un soplo de aire fresco.

Cuando recibe la noticia de la muerte de Theo, su primer amor y exnovio, Griffin se vuelve loco de dolor: a pesar de que se habían separado y Theo se había mudado, Griffin estaba seguro de que solo era cuestión de tiempo que volviesen a estar juntos, donde ambos necesitaban estar. Ahora que sabe que eso nunca va a pasar, se hunde cada vez más en sus manías y en su dolor, y el único que puede entender cómo se siente es Jackson, quien era el novio de Theo y, por tanto, su enemigo.

Creo que no había leído ninguna historia que tratase el duelo como lo hace Adam, y es que la forma desgarradora en la que pasa Griffin los días sabiendo que su plan de futuro, lo que él tenía tan seguro, ha desaparecido, te rompe el corazón sí o sí. También ha resultado muy interesante ver cómo reaccionan a esa muerte el resto de personajes que también se han visto afectados, desde la familia a Jackson, así como el hecho de que algunos intenten quitarle hierro al asunto diciendo que eran demasiado jóvenes para quererse de verdad. Indignante, injusto... un montón de sentimientos que nos quieren hacer saltar de la silla y gritar por todo lo que ocurre.

Sin embargo, tengo que decir que si bien me ha parecido magistral cómo trata ese tema, lo cierto es que la historia se me ha hecho un tanto cuesta arriba por el propio Griffin, y también por Theo, dos personajes que, al contrario de lo que suele pasar, cada vez me han ido cayendo peor, resultándome ambos egoístas e inconscientes para con los sentimientos de los demás, teniendo en cuenta solamente cómo se sentían ellos y lo que querían, sin pensar en las consecuencias.

Así, he de decir que me ha roto el corazón pero, desgraciadamente, también me ha decepcionado: sé que lo mejor es que los personajes no sean perfectos, que tengan defectos, pero es que en este caso no hay nada que los salve. Sin duda, mantengo que mi favorito del autor es Al final mueren los dos, que conisguió transmitirme mucho más.