Reseña: Amor a todo gas — Lauren Asher

AMOR A TODO GAS

LAUREN ASHER

Besties Books
Páginas: 432

Dirty Air #1

Traducción: Ana Robla Vicario

Sí, sí, estoy segura de que la autora os suena, y es que es ni más ni menos que la escritora de la trilogía de Billonarios Dreamland, con La letra pequeña, que ha sido un absoluto exitazo. 

Así, tenía muchas ganas de sumergirme en otra de sus novelas, además, esta en concreto era un sports romance sobre Fórmula 1, el primero que veo sobre este deporte, así que me daba muchísima curiosidad y los comentarios, además, lo ponían por las nubes. 

Noah Slade es una leyenda de la Fórmula 1, ganador, borde, atractivo, e inalcanzable, imposible de conquistar. Ahora que el hermano de Maya ha sido fichado por la misma escudería en la que corre él, se han convertido en compañeros de equipo, a pesar de que la enemistad existente entre ellos por un antiguo accidente no ha desaparecido. Aun así, y a pesar de que todos le aconsejan mantenerse alejada de él, ninguno de los dos puede resistirse a la chispa que surge entre ellos (se ponen a 100 JAJAJA), aunque las inseguridades y prejuicios no se lo pondrán nada fácil. 

Con las ganas que tenía yo de un romance de este estilo, y más aún teniendo en cuenta los buenos comentarios que estaba leyendo al respecto, es una pena que se me haya hecho tan plano, previsible y poco emocionante; ni siquiera el salseo me ha parecido que mereciera la pena, lo que tiene delito siendo una novela de este tipo. 

Reseña: La letra pequeña — Lauren Asher

LA LETRA PEQUEÑA

LAUREN ASHER

MR Ediciones
Páginas: 505

Billonarios Dreamland #1

Traducción: Anna Valor Blanquer

Cubierta: Books and Moods

Aquí tenemos otro de esos libros que se viralizaron a lo bestia en redes y que, al anunciarse su publicación, causaron un gran revuelo por estos lares. 

También admito que yo no me enteré de nada, y no fue hasta que se publicó aquí cuando empecé a oír maravillas y me entraron mil ganas de devorarlo, pero es que New Adult + parque de atracciones, ¿en serio alguien pensaba que no iba a querer leerlo? Eso es que no me conocen. 

Rowan es uno de los herederos del parque de atracciones en el que Zahra trabaja, y tras la muerte de su abuelo, se verá forzado a tomar las riendas de la compañía si quiere acceder a la herencia. Zahra es brillante y creativa, y cuando él lea la propuesta de ella para un nuevo proyecto del parque, la incluirá en el equipo sin dudarlo. Para ayudarla, manteniendo el anonimato, creará un alias para poder trabajar junto a ella, y se dará cuenta de que encajan mucho más de lo esperado; por su parte, ella se encontrará ante una encrucijada entre dos chicos que le atraen: su jefe y ese compañero anónimo tan tierno y cariñoso.

Ay, pues admito que lo he devorado: es de esos libros que podrías leer perfectamente en una tarde tirada en la cama o en la piscina, porque te atrapa por completo, resulta ligero y ágil, y el tira y afloja que se da entre Rowan y Zahra es adictivo. Todas sabemos ya cómo terminan este tipo de historias, pero eso no le quita emoción a la lectura; además, en este caso, el tema del parque de atracciones me ha llamado mucho la atención, me ha parecido muy interesante cómo estaba todo llevado, y me habría encantado que profundizase incluso más. 

Asimismo, no solamente encontramos ese romance y los fueguitos, sino que también se tratan temas como la salud mental, la familia y las condiciones laborales abusivas. 

Puede que no me haya emocionado tantísimo como he visto que le ha ocurrido a otra gente, pero desde luego que ha sido una novela que he disfrutado, con un final muy bonito, y que me ha dejado con mil ganas de leer el resto de la saga, para descubrir las respectivas historias de los hermanos de Rowan. 

¿En conclusión? La letra pequeña me ha enganchado de principio a fin, con unos personajes con personalidades opuestas, un romance mono, y una trama que ha resultado relativamente original para tratarse de un romance New Adult. ¡Me ha gustado mucho!