MONSTRUOS ENCUBIERTOS
DIANA F. DÉVORA
Autopublicación
Páginas: 356
Monstruo busca monstruo #2
AVISO: PUEDE CONTENER SPOILERS DEL ANTERIOR
No sabéis la de ganas que tenía de conseguir esta segunda parte, porque Monstruo busca monstruo me sorprendió de una manera espectacular y... bueno, necesitaba más. Si no habéis oído hablar de la primera parte, haced click aquí para ir a la entrada en la que os cuento qué me pareció.
Que sí, ya sé que no parece ser el tipo de libro que leo yo, pero de todas formas merece muchísimo la pena, así que si la portada o el título no os llaman, hacedme caso: dadle una oportunidad de todas formas.
Tres meses después de lo ocurrido en Monstruo busca monstruo, Summer y su equipo reciben un nuevo encargo, y encima, de un cliente que ninguno de ellos podía haber imaginado: el mismísimo Rayo, su enemigo de toda la vida. En esta ocasión, los Wonderfulosos tendrán que infiltrarse en un internado para hijos de grandes personalidades y tragarse su orgullo: si quieren salir airosos, los dos grupos tendrán que unir sus fuerzas. Pues la misión no hará más que torcerse y llevarles a callejones sin salida, aunque cada vez está más claro que bajo esa superficie de lujos, se esconde algo muy oscuro.
Tengo que avisaros: al empezar la lectura me he sorprendido muchísimo, más que nada porque he sentido que tenía un ritmo completamente distinto y esperaba más una continuación de la historia anterior que un nuevo "episodio" en la vida de estos personajes. No, no me malentendáis, no me ha desagradado para nada, pero es que me ha sorprendido.
Sí, ya os he dicho que tiene otro ritmo, y es algo más pausado que en el anterior, pero gracias a ello, me ha permitido conocer mucho más a fondo a personajes como Zoe, quien gana un gran protagonismo en esta ocasión, Yade y Rayo. Aunque nadie es capaz de eclipsar a Summer. De esta manera, he sentido que se me hacía mucho más sencillo comprender por qué reaccionaban de ciertas maneras y me alegro: muchas cosas cobran sentido.
Y por si eso fuera poco, las relaciones que existen entre los personajes, o las que ellos quisieran que existieran... vaya, la tensión sexual no hace más que aumentar, ¡y las combinaciones me han dejado con la boca abierta en más de una ocasión! En esta historia hay de todo.
A medida que leemos Monstruos encubiertos no encontramos tanta acción-aunque a medida que llegamos al final, se precipita-, pero tal vez por eso, el misterio acerca de la verdad que se esconde en ese internado es aún mayor; no he podido despegarme del libro hasta que lo he terminado, así que avisados quedáis: el enganche es muy serio.
Y por si fuera poco, una vez más Diana ha hecho que se me rompa el corazón con los personajes y con ese final tan... tan... ¡TAN! No tengo ni palabras para describirlo. ¿Qué hago yo hasta que llegue el siguiente?
Por ponerle alguna pega, diré que he tenido la misma sensación que con Monstruo busca monstruo: siento que la autora sigue preparándonos para lo que de verdad será la gran historia, véase el porqué de los poderes de Summer y Rayo y qué es lo que de verdad quiere Kimantics-la empresa mala que creó a Summer-. Me muero por que llegue el momento en el que todo sea explicado.
En definitiva, Monstruos encubiertos ha sabido estar muy a la altura del primero y ha vuelto a emocionarme, sorprenderme y maravillarme. Tenéis que leerlo, de verdad.
Tres meses después de lo ocurrido en Monstruo busca monstruo, Summer y su equipo reciben un nuevo encargo, y encima, de un cliente que ninguno de ellos podía haber imaginado: el mismísimo Rayo, su enemigo de toda la vida. En esta ocasión, los Wonderfulosos tendrán que infiltrarse en un internado para hijos de grandes personalidades y tragarse su orgullo: si quieren salir airosos, los dos grupos tendrán que unir sus fuerzas. Pues la misión no hará más que torcerse y llevarles a callejones sin salida, aunque cada vez está más claro que bajo esa superficie de lujos, se esconde algo muy oscuro.
Tengo que avisaros: al empezar la lectura me he sorprendido muchísimo, más que nada porque he sentido que tenía un ritmo completamente distinto y esperaba más una continuación de la historia anterior que un nuevo "episodio" en la vida de estos personajes. No, no me malentendáis, no me ha desagradado para nada, pero es que me ha sorprendido.
Sí, ya os he dicho que tiene otro ritmo, y es algo más pausado que en el anterior, pero gracias a ello, me ha permitido conocer mucho más a fondo a personajes como Zoe, quien gana un gran protagonismo en esta ocasión, Yade y Rayo. Aunque nadie es capaz de eclipsar a Summer. De esta manera, he sentido que se me hacía mucho más sencillo comprender por qué reaccionaban de ciertas maneras y me alegro: muchas cosas cobran sentido.
Y por si eso fuera poco, las relaciones que existen entre los personajes, o las que ellos quisieran que existieran... vaya, la tensión sexual no hace más que aumentar, ¡y las combinaciones me han dejado con la boca abierta en más de una ocasión! En esta historia hay de todo.
A medida que leemos Monstruos encubiertos no encontramos tanta acción-aunque a medida que llegamos al final, se precipita-, pero tal vez por eso, el misterio acerca de la verdad que se esconde en ese internado es aún mayor; no he podido despegarme del libro hasta que lo he terminado, así que avisados quedáis: el enganche es muy serio.
Y por si fuera poco, una vez más Diana ha hecho que se me rompa el corazón con los personajes y con ese final tan... tan... ¡TAN! No tengo ni palabras para describirlo. ¿Qué hago yo hasta que llegue el siguiente?
Por ponerle alguna pega, diré que he tenido la misma sensación que con Monstruo busca monstruo: siento que la autora sigue preparándonos para lo que de verdad será la gran historia, véase el porqué de los poderes de Summer y Rayo y qué es lo que de verdad quiere Kimantics-la empresa mala que creó a Summer-. Me muero por que llegue el momento en el que todo sea explicado.
En definitiva, Monstruos encubiertos ha sabido estar muy a la altura del primero y ha vuelto a emocionarme, sorprenderme y maravillarme. Tenéis que leerlo, de verdad.
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| 4'5 |
En colaboración con Diana♥
