SOÑAR CON LA SUPERFICIE
LOUISE O'NEILL
Páginas: 290
Autoconclusivo
Vi la portada por primera vez cuando se publicó en inglés y me enamoré perdidamente; entre eso y descubrir que se trataba de un retelling de La Sirenita, os podéis imaginar que no necesité nada más para obsesionarme y necesitarlo en mi estantería.
Ahora bien, lo cierto es que sí que había oído opiniones bastante opuestas: a algunos les encantaba, a otros, todo lo contrario, por lo que aunque esperaba entrar a formar parte del primer grupo, sentía mucha curiosidad.
Aunque sabe que no debería y que es peligroso, Gaia no puede evitar soñar con la superficie, con ser libre, con alejarse de su padre, que pretende dirigir su vida y la de todos los que viven en el fondo del mar. La primera vez que sube a la superficie, Gaia encuentra a un joven humano, al que salva de una muerte segura y, desde entonces, no puede dejar de pensar en él, en que necesita vivir en su mismo mundo pero, ¿cuánto tendrá que sacrificar para cumplir ese sueño?
Ay. Podría haber sido una lectura tan maravillosa... De verdad, es que tenía todas las papeletas: basarse en la idea de la Sirenita de Andersen, mucho más dura y cruda que la de Disney, un giro feminista, y mucha fantasía. Pero, en algún momento, se diluye el sentimiento y se pierde la magia, o al menos eso es lo que me ha pasado a mí.
Me da mucha pena cuando me pasan estas cosas: era una historia con mucho potencial, ya tenía parte del camino hecho al partir del clásico de Andersen, y las referencias al cuento me han encantado, sí, pero es de esas veces en las que la novela te parece más un borrador, un esqueleto sobre el que habría que seguir trabajando: le faltaba fuerza, profundidad, desarrollo y, por encima de todo, sentimiento, pues incluso cuando se narraban escenas crudas, y de esas hay bastantes, en las que se pone de relieve la sociedad tan machista que es la de la novela, tanto bajo el mar como en la superficie, no llegaba a transmitir apenas cómo deberían sentirse los personajes oprimidos, y la propia Gaia, la protagonista, me ha parecido inmensamente egoísta e ingenua, sin evolución ni aprendizaje; aunque no es la única, pues en general ha sido imposible coger cariño a ningún personaje.
Y sí, me gusta que se trate el empoderamiento femenino, que se intente lanzar un mensaje feminista, pero creo que podría haberse tratado mejor, el cambio que se produce es demasiado repentino, poco natural, y no habría estado de más añadir algo más de reflexión.
En definitiva, esperaba muchísimo más de Soñar con la superficie, pero aunque las referencias a la historia original y en general la trama me han gustado mucho, me parece que le falta profundidad y sentimiento, lo que me ha impedido disfrutarlo del todo.