Reseña: Besos de murciélago — Silvia Hervás

BESOS DE MURCIÉLAGO

(Autoconclusivo)

Editorial: Montena

SILVIA HERVÁS

Dejad de flipar. Sí, soy Laury y esto reseñando este libro. En vuestra defensa debo decir que a mí también me pilla un poco desprevenida, pero me ha apetecido.

Bueno, la portada no es de las mejores que haya visto pero tampoco me parece horrible. Quizá la mezcla de dibujo/fotosacadadeweheartit quede un poco —bastante— extraña, pero me parece cuqui el título.

Básicamente es una historia chica conoce chico con un giro para darle originalidad. En esta ocasión Kesley, nuestra protagonista, acaba de comenzar las vacaciones de Navidad con la noticia de que su familia ha aceptado hospedar a un joven británico en su casa. Por su lado, James es obligado por su familia a aceptar ese alojamiento y prescindir de sus privilegios como hijo de la alta sociedad inglesa. Llegará a la casa de los Graham como si fuera a su Vietnam personal y es que, encima, no es el típico británico educado... Más quisiera Kesley, que es la que va a tener que "hacer de niñera".

Sinceramente, no sé cómo leí este libro. Bueno, sí, lo leí en época de exámenes y ya sabéis que ahí cae cualquier cosa. (Me terminé Carolina se enamora... con eso os lo digo todo). El caso es que me esperaba una novela romántica, divertida y cortita para depejarme. Y lo fue.

A ver, le puedo sacar un millón de fallos, tópicos, tonterías y demás a la novela. Sí, por poder puedo. Pero, lo cierto es que me entretuvo bastante, me mantuvo pegada a sus páginas y James consiguió sacarme alguna que otra carcajada. Que es básicamente lo que buscaba con esta lectura.

Esto sería más un consejo para la autora; que dudo que lea esto alguna vez, debería desarrollar más el romance. Está clarísimo que Kesley y James se van a liar. Se sabe. La cosa es cómo se terminan gustando, ese tira y afloja que tanto caracteriza a las buenas novelas. Ese sin vivir. Ese dios-mío-pero-qué-os-beséis-ya. Sin embargo, en esta historia se odian a muerte: Kesley piensa que él es un niño mimando y James piensa que ella es una paleta; hasta que sin querer/por accidente se besan. A partir de ese momento es un amor profundo y para siempre. Mmmh, no. Fue demasiado radical. James pasa de picarla e intentar fastidiarla en todo lo posible a preocuparse por ella, estar pendiente, no molestarla... se vuelve un esclavo casi.

La primera mitad de la novela me encantó —que sería hasta que empieza la parte de romance—, las situaciones son muy cómicas y el libro en sí es fácil de leer. Sin embargo después de ese beso comienzan los celos y la autora no sabe hacer esa evolución en los personajes del "odio" (que me parece muy exagerado que se odien cuando se acaban de conocer) al amor.

De los personajes secundarios el que más me gustó, sin ninguna duda, fue el hermano pequeño de Kesley. Junto con James, fueron los que más me divirtieron. Aunque debo darle un punto positivo a los personajes porque Kelsey piensa como una chica normal. Con esto quiero decir, que durante las situaciones inverosímiles que ocurren en la novela ella suele actuar/pensar de forma bastante realista. Salvo al final que vuelve infantil y estúpida.

En definitiva, no es la gran novela de amor pero divierte mucho. Es cortita, lo cual viene perfecto para esta época de exámenes finales.