Cecilia Ahern
Editorial: Círculo de lectores
Páginas: 432
Autoconclusivo
Llevo teniendo este libro mucho tiempo. Mucho. Pero nunca me había llamado la atención. De hecho, hace no mucho encontramos una librería en la que prácticamente regalaban libros en inglés y Laury se compró este, pero ella aún no lo ha leído ni nada -porque es una vaga-. ¿Qué hizo entonces que lo leyera? Sam Claflin. Más conocido como Finnick. Vamos, que me enteré de que iba a protagonizar la adaptación cinematográfica de este libro, y como estaba segura de que iba a ir a verla, me leí el libro. Fueron fuerzas superiores a mí. En cuanto a la película no sé si tendré que esperar mucho para verla, porque por ahora no he visto ninguna fecha de estreno en España.
A través de una serie de mensajes, correos, cartas, notas de clase o mensajes instantáneos vamos conociendo cómo ha sido la vida de Rosie desde que no era más que una niña pequeña. La mayoría de ellas nos relatarán la historia entre Rosie y Alex, quienes han sido mejores amigos desde el primer día de clase y con el paso de los años no han dejado de serlo. Desde que él, siendo aún adolescente tuvo que irse a EEUU por el trabajo de su padre, la mayor parte de su relación se ha basado en eso, en mensajes, y sus vidas tomaron rumbos muy diferentes, y aún más cuando al no llegar Alex al baile de graduación, Rosie tuvo que ir con otro chico... y se quedó embarazada. Alex fue a Harvard y ella se quedó en casa, teniendo que abandonar sus planes de estudio para ocuparse de su bebé.
Gracias a las cartas, postales y correos, seguirán siendo cercanos e iremos conociendo lo que ocurre en sus vidas, sus problemas, sus sentimientos... unos sentimientos de los que nunca han hablado y que se han empeñado en ignorar.
Ya os digo que aunque obviamente es una novela de amor, no es una historia pastelosa, porque os conozco y seguro que lo estáis pensando. Pero no. Más que nada porque a Rosie no hacen más que torcérsele las cosas mientras que a Alex parece que todo le sale redondo; y habrá más de un momento en el que os indignaréis por la mala suerte que tiene nuestra querida protagonista, a la que parece que ha mirado un tuerto cada día de su vida.
Y también me he reído, lo que siempre es un punto a favor de cualquier libro, sobre todo cuando ambos están en el instituto con su "querida profesora", y con algunas conversaciones que ¡madre mía! Sobre todo una vez Katie, la hija de Rosie, va creciendo y escribe algún que otro correo que... ¡madre mía jaja!
Si bien en gran parte de la historia Rosie me ha puesto de los nervios por lo inmadura que es, al final he acabado cogiéndole cariño porque no es más que una víctima de una noche tonta que le ha descolocado toda su vida, pero aún así es una mujer muy fuerte y vemos cómo con el paso del tiempo va madurando y aprendiendo que de algo malo ha podido salir algo tan bonito como su querida hija. Y Alex... bueno, gana puntos porque me le he imaginado todo el tiempo como a Sam Claflin, pero aún así... me ha parecido un poco pánfilo.
Ya podéis imaginar cómo va a terminar esta historia, y sí, no es nada original porque desde un primer momento lo pillas al vuelo, además me he frustrado bastante con todas las oportunidades que tienen tanto Rosie como Alex para revelar al otro sus sentimientos y finalmente por unas razones o por otras la cosa no cuaja. Me han entrado unas ganas de matarlos increíbles.
Bueno, si como a mí os gustan este tipo de historias, deberíais leerlo. Y también si vais a ver la película, que no sé cómo será pero solamente por los actores ya tiene muy buena pinta. Ahí os dejo el trailer por si no lo habéis visto ;)
A través de una serie de mensajes, correos, cartas, notas de clase o mensajes instantáneos vamos conociendo cómo ha sido la vida de Rosie desde que no era más que una niña pequeña. La mayoría de ellas nos relatarán la historia entre Rosie y Alex, quienes han sido mejores amigos desde el primer día de clase y con el paso de los años no han dejado de serlo. Desde que él, siendo aún adolescente tuvo que irse a EEUU por el trabajo de su padre, la mayor parte de su relación se ha basado en eso, en mensajes, y sus vidas tomaron rumbos muy diferentes, y aún más cuando al no llegar Alex al baile de graduación, Rosie tuvo que ir con otro chico... y se quedó embarazada. Alex fue a Harvard y ella se quedó en casa, teniendo que abandonar sus planes de estudio para ocuparse de su bebé.
Gracias a las cartas, postales y correos, seguirán siendo cercanos e iremos conociendo lo que ocurre en sus vidas, sus problemas, sus sentimientos... unos sentimientos de los que nunca han hablado y que se han empeñado en ignorar.
Ya os digo que aunque obviamente es una novela de amor, no es una historia pastelosa, porque os conozco y seguro que lo estáis pensando. Pero no. Más que nada porque a Rosie no hacen más que torcérsele las cosas mientras que a Alex parece que todo le sale redondo; y habrá más de un momento en el que os indignaréis por la mala suerte que tiene nuestra querida protagonista, a la que parece que ha mirado un tuerto cada día de su vida.
Y también me he reído, lo que siempre es un punto a favor de cualquier libro, sobre todo cuando ambos están en el instituto con su "querida profesora", y con algunas conversaciones que ¡madre mía! Sobre todo una vez Katie, la hija de Rosie, va creciendo y escribe algún que otro correo que... ¡madre mía jaja!
Si bien en gran parte de la historia Rosie me ha puesto de los nervios por lo inmadura que es, al final he acabado cogiéndole cariño porque no es más que una víctima de una noche tonta que le ha descolocado toda su vida, pero aún así es una mujer muy fuerte y vemos cómo con el paso del tiempo va madurando y aprendiendo que de algo malo ha podido salir algo tan bonito como su querida hija. Y Alex... bueno, gana puntos porque me le he imaginado todo el tiempo como a Sam Claflin, pero aún así... me ha parecido un poco pánfilo.
Ya podéis imaginar cómo va a terminar esta historia, y sí, no es nada original porque desde un primer momento lo pillas al vuelo, además me he frustrado bastante con todas las oportunidades que tienen tanto Rosie como Alex para revelar al otro sus sentimientos y finalmente por unas razones o por otras la cosa no cuaja. Me han entrado unas ganas de matarlos increíbles.
Bueno, si como a mí os gustan este tipo de historias, deberíais leerlo. Y también si vais a ver la película, que no sé cómo será pero solamente por los actores ya tiene muy buena pinta. Ahí os dejo el trailer por si no lo habéis visto ;)