Reseña: Yo, Simon, Homo Sapiens — Becky Albertalli

YO, SIMON, HOMO SAPIENS

BECKY ALBERTALLI

Puck
Páginas: 278
Creekwood #1

SE RECOMIENDA LEER CON OREOS A MANO

Me parecería muy raro que no hubieras oído hablar aún de este libro, o al menos haberlo visto por las redes sociales, pues de un tiempo a esta parte la verdad es que no he parado de encontrármelo por todas partes. Y, ya sabéis, se me ponen los dientes largos rápidamente cuando veo que se habla tanto de un libro, más que nada por ver si es realmente bueno o el hype es injustificado. Bueno. 

No tenía mucha idea de la trama, más allá de que se trataba de un libro de temática LGTB (ya sabéis, lesbianas, gays, ...), y aunque me parece genial que estén empezando a aparecer en la literatura para ayudar a normalizar y enseñar a respetar a más de un retrógrado, me daba miedo que se centrase en lo de siempre: lo mal que lo pasa por ser diferente y lo malo que es el mundo. Y no me malentendáis, porque esa crítica es necesaria, y más viendo lo que está pasando a día de hoy en pleno s. XXI pero que la mayoría de los libros de esta temática vayan del mismo palo ya me rechina. 

Y me ha sorprendido, tengo que reconocerlo. 

Simon es gay. Simon ha conocido a Blue por internet, un chico que le encanta, que va a su instituto pero cuya identidad desconoce. Simon aún no está preparado para salir del armario. Por eso, cuando otro compañero empieza a hacerle chantaje con enseñar a todo el mundo los emails que ha estado compartiendo con Blue, el mundo se le viene encima, todo empieza a torcerse y Simon no tiene otra cosa que hacer que aceptar. 

Me doy cuenta de que os he dicho antes que este libro no iría sobre lo mal que trata la gente a las personas con distinta orientación sexual, y por la sinopsis parece que sí lo sea. Pero no. A pesar de ser una situación muy fuerte, que hace a Simon sentirse mal, la historia no gira en torno a eso: ni siquiera se le da demasiada importancia al menos en un principio. Y lo cierto es que no sé muy bien cómo tomármelo. 

Es una historia de amor. Simple y llanamente. Es la historia de un chico que se enamora de otro chico  que, por miedo o vergüenza, no quiere que sepa quién es. A pesar de que con él se siente más cómodo que con cualquier otra persona. 

También es una historia de amistad: de los amigos que siempre están ahí pase lo que pase, que aunque se enfaden contigo porque has metido la pata, van a acabar perdonándote porque eso es lo que significa la amistad. Una historia sobre la familia, que por mucho que nos incordie, siempre está ahí. Y una historia de respeto, de la importancia de la privacidad y de lo valioso que es poder tomar tus propias decisiones. 

Y al principio, más o menos hasta la mitad del libro, no terminaba de entender a qué venía tanto revuelo, porque sí, era entretenido, y ahí estaba el misterio de intentar adivinar quién sería Blue -quien al final ha sido el que había pensado desde un primer momento, por cierto, estaba muy claro-, pero no lograba ver ninguna diferencia con cualquier otro libro de amor adolescente (y es por esto que no se lleva la máxima puntuación). Y entonces, no sé muy bien en qué momento, empecé a decirme que era una historia preciosa y que cómo no la había leído antes. Porque se te mete en el corazón, y lo pasas mal a la vez que Simon sufre, y te emocionas, te ríes con cada email que recibe de parte de Blue. Y les quieres un poquito a todos. 

Y claro que hay crítica social, porque un tema como este se lo merece: no puede ser que haya aún gente que no se dé cuenta de que somos todos iguales. Pero está muy bien tratado, en serio. 

Vamos, que no se me ocurre un motivo por el que no fuera a gustaros: a mí me ha conmovido un montón, y hacia el final no podía dejar de sonreír como una idiota porque Simon-Blue <3. Así que sí, recomendadísimo.

4'5

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