Reseña: El viento del norte — Alexandria Warwick

EL VIENTO DEL NORTE

ALEXANDRIA WARWICK

Faeris
Páginas: 536

Los cuatro vientos #1

Traducción: Jesús Jiménez Cañada

Cubierta: Story Wrappers

Y vuelta a la fantasía con portadas oscuras, esta vez de la mano de una novela de la que había oído maravillas, con un enemies to lovers, un mundo de magia, y con vibes de La bella y la bestia. 

No me gusta mucho decir lo de "te gustará si te han gustado este o aquel", porque cuando me intentan vender un libro de esa forma, en general no suele tener nada que ver, pero en este caso os aviso: la novela es un popurrí de varias historias que lo han ido petando últimamente, personalmente me ha recordado mucho al de Un trato con el rey de los elfos, con algo de Una corte de rosas y espinas... pero aun así, o quizás por eso mismo, me ha atrapado y me ha flipado: 

Desde que sus padres murieron, Wren se ha ocupado de cuidar de su hermana, y de asegurarse de que ambas sobrevivan al eterno invierno, jugándose la vida una y otra vez para conseguir comida, pero ha llegado un momento en el que ya no podrá seguir protegiéndola... ¿o puede que sí? Solo la sangre de una mujer mortal unida en matrimonio al dios oscuro, el Viento del Norte, es capaz de mantener la gran barrera que es la Sombra, que protege a los habitantes de las Tierras Yermas, y ese Rey Escarcha está a punto de volver a su pueblo para elegir a su nueva esposa. Cuando él selecciona a su hermana, Wren no dudará y se sacrificará por ella, y no piensa rendirse sin luchar. 

Es un argumento que nos suena a todas un montón, pero aunque pueda pecar de poco original, os prometo que me ha enganchado como una cosa loca: desde que comencé y me ubiqué en este mundo helado en el que los humanos viven acosados por unas terribles criaturas de sombra, y me encontré con la peculiar relación de Wren con el Viento del Norte, ya no pude separarme de sus páginas. 

Por supuesto, como ya avanzaba antes, no deja de ser un romantasy, y además con un romance de esos que se cuece a fuego lento, así que ¡buf!, reconozco que en ocasiones me tiraba de los pelos cuando veía lo difíciles que se hacían los dos. Ahora, ha sido entretenidísimo, porque además encontramos el desarrollo de ambos protagonistas, se tratan temas como el duelo, la adicción, o la depresión, y contamos además con una trama que tiene acción a raudales, mentiras y traiciones, así que el drama y el salseo están servidos. 

Y, bueno, debo decir que cuenta con uno de los epílogos más deliciosos que he leído :P. 

En resumen, El viento del norte es el inicio de una saga que viene pisando fuerte, y que si bien no resulta especialmente original o sorprendente, sí me ha en-can-ta-do tanto por sus personajes como por lo bien llevada que está la trama.